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¿Por qué no puedo tener un hijo de manera natural?

Girofiv

El primer paso para determinar la causa de la esterilidad y poder aplicar el tratamiento óptimo es hacer un estudio de la pareja y de los informes aportados para reunir toda la información necesaria de cada caso.

Aun así, no existe ninguna prueba determinante que indique la capacidad reproductora de la pareja. Solo la edad de la mujer es un factor pronóstico demostrado, ya que a mayor edad menos posibilidades de conseguir un embarazo de manera natural.

Cada caso es diferente, pero, normalmente, si la pareja visita por primera vez GIROFIV, el ginecólogo solicitará un estudio básico. Cuando sean necesarias pruebas más específicas, se suele pedir un estudio complementario.

Estudio básico de la esterilidad (1ª visita)

Historia clínica

Anamnesis detallada con el objetivo de conocer el historial médico del paciente, que recoge factores como:

  • Edad
  • Duración de la esterilidad
  • Antecedentes familiares
  • Enfermedades o intervenciones previas
  • Gestaciones previas
  • Valoración del número y el momento de las relaciones sexuales

Exploración y ecografía ginecológica

Sirve para valorar la anatomía y la funcionalidad del aparato reproductor femenino. Si se hace al inicio del ciclo nos da información sobre la reserva ovárica, ya que se pueden cuantificar el número de folículos que hay en cada ovario.

Analítica hormonal basal

Determina ciertas hormonas en la sangre para valorar la funcionalidad del ovario, como FSH, LH, estradiol, progesterona, AMH...

Historia clínica

Anamnesis detallada con el objetivo de conocer el historial médico del paciente, que recoge factores como:

  • Edad
  • Duración de la esterilidad
  • Antecedentes familiares
  • Enfermedades o intervenciones previas
  • Valoración del número y el momento de las relaciones sexuales

Seminograma / TRE

Se trata del estudio básico del semen. Sirve para determinar su calidad y se valora, concretamente, el volumen, el número de espermatozoides, la movilidad y la morfología.

CONSULTA TABLA OMS

Estudio complementario de la esterilidad (pruebas específicas)

Cariotipo

Es el estudio del número y la estructura de los cromosomas que están presentes dentro del núcleo de las células. Se obtiene a partir de una extracción de sangre.

Cada célula del cuerpo debe tener un total de 46 cromosomas, organizados en 22 pares de cromosomas autosómicos y un par de cromosomas sexuales, que son los encargados de determinar el género. Las únicas células del cuerpo que contienen la mitad de los cromosomas (23) son los óvulos y los espermatozoides, ya que cuando se junten para formar el embrión, deben sumar los 46 cromosomas.

Una alteración en el cariotipo de una paciente aumenta el riesgo de producir unos gametos (óvulos) con una carga genética anómala. Por tanto, se incrementa la producción de embriones con problemas genéticos y se producen casos de esterilidad o abortos de repetición.

Sonohisterosalpingografía (HyFoSy)

La Sonohisterosalpingografóa (HyFoSy) es una prueba de imagen que permite a través de una ecografía vaginal, previamente introduciendo un gel específico (ExEm Foam) que actúa como contraste, realizar un estudio completo anatómico y funcional de la cavidad uterina y las trompas de Falopio. Es menos dolorosa que la histerosalpingografía (prueba convencional que hasta ahora se utilizaba para valorar la permeabilidad tubárica) y no requiere recurrir a un servicio externo de radiología por lo que se puede realizar en la misma consulta. Es importante valorar la permeabilidad tubárica como parte del protocolo diagnóstico en un estudio de esterilidad. Las trompas son imprescindibles ya que es donde se produce la fecundación. Un 30% de los casos de esterilidad se deben a una obstrucción en las trompas de Falopio.

Laparoscopia

Es una técnica que permite observar el interior de la cavidad abdominal mediante unas ópticas que se introducen a través del abdomen. Es una intervención que necesita anestesia general y algunas horas de ingreso, aunque se trata de una exploración de mínima invasión.

Durante la intervención se consigue una visión directa de la superficie externa del útero, los ovarios, la cavidad pélvica y las trompas de Falopio, que pueden ser movilizadas con unas pinzas especiales y permite detectar la existencia de adherencias responsables de su fijación. También permite evaluar su permeabilidad mediante el paso de un contraste.

Su uso queda limitado a aquellos casos con factores de riesgo y en los cuales la histerosalpingografía no fuera concluyente.

En ciertos casos, también es posible aprovechar la exploración para tratar y reparar ciertas patologías observadas.

Histeroscopia

Esta técnica sirve para valorar la cavidad uterina y el endometrio.

Consiste en la introducción de una óptica dentro de la cavidad uterina a través del cuello del útero. Así se obtiene una visión directa de la mucosa endometrial y permite diagnosticar cualquier anomalía de las paredes de la cavidad uterina, como pólipos, miomas, sinequias...

Estudio de la receptividad endometrial (ERA)

ERA es un test diagnóstico que evalúa la receptividad endometrial de la mujer. Determina la ventana de implantación personalizada de cada paciente estableciendo el momento óptimo para la transferencia de embriones. El endometrio es el tejido que recubre el útero y donde se implantará el embrión si todo está correcto alrededor del día 21 del ciclo. Se ha visto que 3 de cada 10 pacientes tienen una ventana de implantación desplazada.

El estudio ERA utiliza herramientas moleculares para analizar la expresión de un grupo de genes responsables de esta función. Para ello, es necesaria la realización de una biopsia endometrial que suele ser ambulatoria y no necesita sedación.

Está indicado en casos de ausencia de implantación con transferencias de embriones de buena calidad; y con un útero de morfología y grosor normal.

Cariotipo

Es el estudio del número y la estructura de los cromosomas que contiene el núcleo de las células del individuo. Se obtiene a partir de una extracción de sangre.

Cada célula del cuerpo debe tener un total de 46 cromosomas, organizados en 22 pares de cromosomas autosómicos y 1 par de cromosomas sexuales, que son los encargados de determinar el sexo. Las únicas células del cuerpo que contienen la mitad de los cromosomas (23) son los óvulos y los espermatozoides, ya que cuando se junten para formar el embrión, deben sumar los 46 cromosomas.

Una alteración en el cariotipo de un paciente aumenta el riesgo de producir unos gametos (espermatozoides) con una carga genética anómala. Por tanto, se incrementa la producción de embriones con problemas genéticos y se producen casos de esterilidad o abortos de repetición.

Fragmentación del ADN espermático

Es el estudio del material genético de los espermatozoides. Permite valorar el daño existente en el ADN; es decir, permite analizar el grado de fragmentación del ADN espermático.

En ciertas ocasiones, el ADN puede presentar puntos de corte o pérdidas de material genético en las cadenas de ADN del espermatozoide. Cuantos más puntos de ruptura, peor será el pronóstico reproductivo, ya que los embriones generados con estos espermatozoides tendrán más probabilidades de tener una baja calidad y/o un bajo potencial de implantación. Estos daños pueden ser reparados en algunos casos por el óvulo, aunque depende principalmente de su calidad. Así, cuanto mayor calidad ovocitaria, mayor capacidad de reparación del daño espermático.

La técnica utilizada se llama CometFertility y es el único test que permite diferenciar, con una mayor sensibilidad, dos tipos de rotura en el ADN espermático asociado a diferentes condiciones clínicas:

  • de CADENA SENCILLA: son roturas producidas de manera extensiva y se asocian a una menor tasa de fecundación.
  • de CADENA DOBLE: son roturas presentes en regiones específicas, que no impiden el embarazo, pero pueden implicar un mayor riesgo de aborto.

Existen diferentes factores que pueden causar fragmentación, y se clasifican de la manera siguiente:

  • Factores internos (fragmentación primaria)
  • La fragmentación está provocada por una maduración incorrecta del espermatozoide en el epidídimo, o bien, porque los mecanismos de control que se encuentran en el testículo presentan un mal funcionamiento, no son capaces de eliminar estos espermatozoides alterados y los dejan pasar hasta la eyaculación. Esto podría explicar que se encuentre una mayor incidencia de fragmentación del ADN en los hombres mayores de 45 años.
  • Factores externos (fragmentación secundaria)
  • Existen diversos factores que pueden inducir la ruptura del ADN. Pueden ser factores patológicos (cáncer, procesos inflamatorios, varicocele, criptorquidia o estrés) o bien factores externos (contaminación, tabaco, ciertos medicamentos, edad avanzada o alteraciones metabólicas por sobrepeso, entre otros). En algunos casos, el daño es permanente, como ocurre después de hacer tratamientos de radioterapia o quimioterapia. En otros puede ser transitorio, como sucede con la existencia de un varicocele testicular, exposición a temperaturas elevadas (a nivel profesional o como consecuencia de un episodio de fiebre alta), procesos inflamatorios y/o infecciosos testiculares (orquitis).

El estudio de la fragmentación estaría indicado en los casos siguientes:

  • Varicocele
  • Criptorquidia
  • Factor seminal grave
  • Esterilidad idiopática
  • Abortos de repetición
  • Fallos repetidos de FIV
  • Mala calidad embrionaria
  • Diabetes Mellitus
  • Quimioterapia
  • Exposición a tóxicos o a temperaturas elevadas
  • IMC >25
  • Edad >45 años
  • Fumadores (>10 c/día)
  • Alcohol (>6 u/semana)
  • Selección de donantes de semen

Fish

La Hibridación In Situ Fluorescente (en inglés, FISH) es una técnica de citogenética molecular basada en la hibridación producida entre las dos cadenas del ADN cuando su secuencia es complementaria.

Es un método sensible para valorar la correcta dotación cromosómica de una célula.

El FISH en espermatozoides está indicado en aquellos pacientes que presentan alteraciones en el cariotipo, alteraciones en el estudio de la meiosis y en casos de alteraciones en el seminograma.

Las anomalías genéticas y cromosómicas pueden ser causa de esterilidad o infertilidad por la alteración de la producción de espermatozoides o por alteración de las vías seminales y, por tanto, del transporte de los espermatozoides.

Esta técnica tiene la característica de que solo permite hacer el estudio de un número limitado de cromosomas. Normalmente, se suele pedir el estudio de 5 cromosomas: X, Y, 13, 18 y 21. De manera que puede dar un resultado normal en aquellos cromosomas que se han estudiado, pero presentar alguna anomalía cromosómica en los otros. También está limitada en pacientes con un número bajo de espermatozoides, ya que la técnica no puede dar resultado por falta de material. Para poder llevarse a cabo es recomendable que presente un millón de espermatozoides/ml, como mínimo.

Otros

En el caso de que existan disfunciones en las relaciones sexuales, dolor testicular o sospecha de la presencia de varicocele, es recomendable la consulta a un andrólogo.